Descripción
Según estudios recientes, América Latina es una de las regiones más desiguales del mundo. Su alto grado de desigualdad no sólo está dado por los elevados indicadores de pobreza e indigencia, sino por concentrar una mayor cantidad de riqueza en pocas manos. Amén de ello, la desigualdad en América Latina ha sido estudiada principalmente desde la pobreza.
Por otra parte, la desigualdad en América Latina se manifiesta con intensidad en términos culturales y educativos. Argentina ha sido, desde fines del siglo XIX, uno de los países que más ha luchado por erradicar el analfabetismo, y mejorar el acceso a la escuela primaria y secundaria. Recientemente, en el año 2006, la escuela secundaria se ha transformado en obligatoria por disposición de la Ley de Educación Nacional, 26.206. El crecimiento sostenido de la matrícula en la escuela primaria desde fines del siglo XIX y en la secundaria desde mediados del siglo XX, ha tenido como consecuencia un aumento en la cantidad de alumnos que acceden al nivel superior (terciario y universitario), que se constituía como instrumento de distinción por excelencia de la clase alta hasta entonces.
El desarrollo de los sistemas educativos y la segmentación que se produce en su interior, los hace cada vez más permeables a las diferencias socioeconómicas y culturales de las distintas familias, habilitando una segmentación educativa horizontal y contribuyendo a la reproducción de la desigualdad social. De este modo, se conforman circuitos de elite en instituciones prestigiosas que, a la vez, permiten el acceso a los niveles más elevados del sistema educativo y del mercado de trabajo.
La provincia de Córdoba, segunda en algunos indicadores sociodemográficos luego de Buenos Aires, históricamente se ha caracterizado por ser asociada a las letras y la formación de doctores en la Universidad Nacional de Córdoba, que nace de la mano los Jesuitas hace más de 400 años y es la más antigua del país y una de las más antiguas de América Latina. La impronta doctoral hace que la ciudad de Córdoba sea calificada por la historia como “la docta” y que la aristocracia haya sido calificada como una “aristocracia de toga”.
Dado el reciente crecimiento de la matrícula en todos los niveles, y particularmente el fenómeno que se llamó de “masificación” o “universalización” del nivel secundario, que en otras épocas se caracterizó por ser preparatorio para el acceso a las universidades y en cierto modo a la aristocracia cordobesa, las familias de clase alta han articulado desde mediados del siglo XX un conjunto de estrategias de distinción, que necesariamente han implicado cambios para mantener las distancias con otras familias del espacio social.
Estas estrategias de distinción han sido posibilitadas por cambios institucionales en el subsistema educativo que forma a las familias de clase alta, que tiene una oferta diferenciada en todo su recorrido, y por las prácticas mismas de las familias frente a este proceso.
Podemos identificar dos grandes tendencias, una hacia la segmentación de la oferta educativa, optando principalmente por el sector de gestión privado que beneficia a estas familias en múltiples dimensiones a partir de una modalidad diferenciada, exclusiva y contenedora, sobre todo en los casos de dilación de los estudios. Otra consiste en la acumulación de años de escolaridad, principalmente por medio del acceso a la educación de postgrado, muchas veces asociada a periodos de movilidad educativa internacional.
De este modo, las familias de clase alta establecen estrategias de distinción más o menos eficientes para sostener la desigualdad que los posiciona en las coordenadas dominantes del espacio social.
En esta presentación daremos cuenta primeramente del proceso de construcción de las clases sociales para Gran Córdoba (en el marco del equipo de investigación que formo parte y dirige la Dra. Alicia B. Gutiérrez y co-dirige el Dr. Héctor Mansilla) por medio de una metodología de Análisis de Correspondencias Múltiples y Clasificación Jerárquica Ascendente. En segundo lugar, por medio de entrevistas en profundidad que reconstruyen las trayectorias educativas de 36 familias de clase alta de Córdoba considerando a todos sus miembros en las tres últimas generaciones, se muestran los efectos subjetivos y objetivos que ha tenido la “masificación” de la educación secundaria en Argentina en las estrategias educativas de las familias de clase alta, que buscan de mantener o mejorar su posición en el espacio social.
De este modo, se pretende reconstruir el proceso de segmentación y segregación de la oferta educativa para las familias de clase alta, asociado a una estigmatización, en términos simbólicos, de la educación de gestión estatal (mal llamada pública sin más por los entrevistados) y una ponderación de la educación privada y la internacionalización de la educación de sus hijos, como mecanismos preparatorios de una ciudadanía global, al mismo tiempo que la distinción con las otras instituciones educativas de nivel secundario.
