Descripción
Esta ponencia tiene como objetivo analizar la dinámica que adquiere la desigualdad en las experiencias escolares juveniles en la escuela secundaria. Nuestra intención es dar cuenta de los nuevos modos de habitar las instituciones educativas que tienen lugar a la par del proceso de masificación del nivel, sin descuidar el estudio de la configuración de nuevos procesos de desigualdad. Para ello nos enfocamos en una de las dimensiones, indagando en los procesos de convivencia escolar y participación política. De esta forma proponemos un recorrido por las distintas cuestiones que interpelan a los y las estudiantes de la escuela secundaria y las acciones que realizan. Realizaremos una suerte de mapeo, prestando atención a los intereses juveniles y cómo perciben las posibilidades de participar en el espacio escolar. Para ello organizamos el texto en tres momentos.
En el primero analizamos distintas temáticas que atraviesan la experiencia escolar juvenil: los aspectos curriculares –tanto lo referido a las propuestas de reforma de la escuela secundaria como a la demanda de aplicación de la ESI- la infraestructura escolar y la discusión de los Acuerdos de Convivencia Escolar, particularmente acerca de las regulaciones sobre la vestimenta que llevan los estudiantes. Si bien cada una de estas cuestiones adquiere ciertas particularidades, es factible observar la presencia transversal de temáticas sobre el género y las sexualidades y la demanda de construcción de vínculos intergeneracionales de mayor proximidad.
En un segundo momento, exploramos en las características que asumen los vínculos intergeneracionales, prestando atención a su reconfiguración y al carácter situacional y aleatorio que parecieran adquirir. El tipo de vínculo, y con él la posibilidad de reconocer derechos, pero también de pensarlos como efectivos, adquieren diferentes formas “depende” con quien sea (profesor copado // profesor que no los escucha). De esta forma, resulta factible observar que los derechos siguen una misma lógica situacional y aleatoria, tal como se construye el vínculo adultos-jóvenes. Así observamos las diferencias entre el nivel primario y el secundario, el peso de la socialización familiar y escolar así como el uso de los espacios institucionales.
Finalmente, la ponencia propone un recorrido por las demandas estudiantiles y el tipo de acciones que despliegan, parte de un amplio repertorio que va desde acciones más tradicionales como cartas, notas, sentadas, marchas hasta tomas de escuelas, pollerazos o frazadazos, pasando por actitudes más institucionales tanto como la presencia de grupos más reducidos motivados por demandas particulares. A partir de varias viñetas damos cuenta de distintas figuras de ciudadanía emergentes en la escuela secundaria que condensan la diversidad de prácticas políticas presentes. Los extractos de las entrevistas brindan la oportunidad de repensar la noción de ciudadanía que se pone en juego actualmente en la escuela secundaria, observar la existencia de un cúmulo de cuestiones que interpela a las juventudes así como de una variedad de formas de actuar en el espacio público, como elementos que permiten imaginar transformaciones culturales de amplio alcance.
En la ponencia presentamos hallazgos del que surgen como parte del trabajo de campo realizado en el marco del Proyecto PICT 2014-2958 “Escuela secundaria, políticas públicas e impacto en la desigualdad: convivencia y formación intergeneracionales” con sede en la UNIPE y FLACSO Argentina. En ese proyecto consideramos nueve escuelas secundarias de tres centros urbanos: Ciudad de Buenos Aires, tres localidades de la Provincia de Buenos Aires (La Plata y Moreno) y Comodoro Rivadavia (Chubut). También recuperamos aportes del Proyecto CITADEL (Ciudadanos inteligentes para ciudades participativas) del que participaron el GEPOJU del Instituto de Investigaciones Gino Germani de la UBA junto a universidades españolas, mexicanas y brasileñas. Este ejercicio, si bien preliminar, permite señalar una relación directamente proporcional entre mayores grados de institucionalidad y la presencia en marchas y protestas en el espacio público. Asimismo, posibilita observar qué cuestiones interpelan más al colectivo estudiantil.
