Descripción
A comienzos del siglo XXI el sostenido fortalecimiento de los bloques regionales MERCOSUR y UNASUR representó un punto de inflexión en la definición de la relación entre lo local y lo global, configurando un nuevo modelo territorial contrapuesto al paradigma de centro–periferia, históricamente sostenido.
Entre los innumerables compromisos que estos nuevos escenarios configuran, las Universidades Públicas asumen contribuir a la democratización de la educación, consolidando espacios de formación universitaria en articulación con las instituciones y gobiernos locales, provinciales y nacionales.
El Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) propuso la generación de un Programa que optimice los recursos institucionales para atender las demandas de educación en las distintas regiones. En orden a esos planteos la Secretaría de Políticas Universitarias impulsó la creación Centros Regionales de Educación Superior y Delegaciones Universitarias.
A nivel local, en el año 2014 la Universidad Nacional de San Juan concreta la creación de la “Delegación Valles Sanjuaninos de la Universidad Nacional de San Juan” que comprende los Departamentos JACHAL, IGLESIA, VALLE FERTIL y CALINGASTA.
El proyecto “La Delegación Valles Sanjuaninos reconfigurando la UNSJ”, se propone seguir dos líneas de indagación. Inicialmente, se procura profundizar el estudio anterior discurriendo el análisis de los procesos constitutivos de la Delegación al interior del territorio que la comprende, analizando los modos en que se cristaliza el sistema de relaciones entre la sede de la Delegación, cada uno de sus nodos y la sede central. Paralelamente se propone comprender los modos en que el proceso de institucionalización de la Delegación va reconfigurando las dinámicas institucionales de la Universidad Nacional de San Juan.
En el presente trabajo se exponen lecturas preliminares que procuran responder a uno de sus objetivos que refiere a distinguir los formatos relacionales que se configuran entre la Delegación, cada una de las subsede y el área central de la UNSJ.
Particularmente interesa comprender estas dinámicas relacionales (estrategias, intereses y agentes, etc.), descifrando las particularidades que asume la política académica al momento de “hacer la Delegación”.
La construcción del proceso de análisis planteada desde los objetivos, promueve un enfoque comprensivo, fundado en los siguientes principios epistémicos: 1) el objeto de estudio se percibe como parte de una totalidad, es decir, no sólo en sus relaciones internas sino con el contexto. Metodológicamente, esto implica integrar la información referida al objeto con informaciones relativas a otros contextos sociales que inciden en él, que lo revelan o explican; 2) al instituirse el campo de las prácticas educativas universitarias en la dualidad de la estructura, se tiene presente la dimensión histórica del espacio de relaciones. Las orientaciones teórico-metodológicas se sustentan en un proceso de investigación al modo de la experimentación o de la producción rizomática (Gilles Deleuze y Félix Guattari). La elaboración de ésta metodología se estructura desde los principios operativos del rizoma, que son: Interconexión y heterogeneidad, Multiplicidad, Cartografía y calcomanía y Ruptura asignificante; ésta mixtura supone una forma de red indeterminada de contenidos que son insertados en relación a los principios de conexión, heterogeneidad, multiplicidad, ruptura asignificante y cartografía. Es decir, operaciones de investigación que ofrecen interpretaciones y narrativas sociales que posibilitan la comprensión crítica de la realidad a partir de revelar y reactualizar aspectos no conscientes del mundo social (Silvia Rivera Cusicanqui).
Universidad, Delegaciones, democratización
