Descripción
La comunicación presenta los resultados del proyecto de investigación “Políticas públicas, democratización de la educación superior y la recepción en las universidades públicas: sujetos prácticas y dispositivos” desarrollado entre los años 2015-2019. Se aborda el análisis de las políticas públicas del sector universitario destinadas a la democratización del nivel problematizando la recepción en las instituciones destinatarias de las políticas colocando bajo análisis a los actores y sus capacidades para interpretar e influir en las decisiones institucionales. Como perspectiva teórica se sostiene que la intervención de los actores se conforma en relación con las creencias y tradiciones institucionales, y que en base a las mismas se construyen categorías con las que sus actores fijan las condiciones de autosostenimiento y establecen identidades. El estudio se focalizó en la Universidad Nacional de Quilmes, decisión que se fundamentó en las reformas producidas en sus dispositivos de acceso y acompañamiento de trayectorias de estudiantes de primer ingreso. La reforma tuvo como objetivos conformar un nuevo diseño académico tras la supresión del ingreso selectivo mediante exámenes y la creación de un Ciclo propedéutico con el objetivo de mejorar las condiciones de acceso, la permanencia y la graduación.
El caso UNQ pareciera mostrar que las decisiones de las autoridades políticas de la universidad se encuentran mediadas por las “señales” provenientes de políticas públicas, las que permiten a los actores internos estructurar capital político para las disputas institucionales. A su vez la disputa por el sentido que a esas políticas públicas se les asignan configura un espacio en el que se distribuyen las posiciones de los actores académicos que colcan en tensión el concepto de inclusión social con el de iniciación en la formación en un campo disciplinar específico.Como uno de los principales resultados se ha observado que Universidad el peso de las disciplinas y el prestigio asociado a ellas, mantiene vigente la legitimidad de los procesos de selección de los estudiantes. En el contexto de la cultura universitaria la progresividad y terminalidad de los estudios no se problematiza como un efecto posible de los condicionantes propios de esa cultura, razón por la cual la no culminación de una carrera de grado resulta una posibilidad naturalizada. Esto independientemente del reconocimiento de que las políticas de inclusión en general y el aporte particular de cada uno de ellos en sus prácticas de enseñanza resulten relevantes para atender a las desigualdades de origen de los estudiantes, porque existe una creencia compartida que el éxito académico dependerá en mucho del talento y del esfuerzo de los estudiantes, digamos, a pesar de los obstáculos que se le presenten.
