Descripción
La obligatoriedad de la enseñanza secundaria hizo que se experimentara un crecimiento importante en el número de aspirantes a ingresar a la Universidad. De todos modos, este proceso de democratización encontró sus limitaciones ya que el incremento del ingreso a las UUNN (Universidades Nacionales) no dio como resultado un aumento correlativo en el número de graduados/as, dando como resultado altas tasas de deserción comparadas con estándares internacionales.
Esto presupone que las UUNN tienen sus propias culturas y reglas que deben ser comprendidas y aceptadas por el estudiantado. Para llegar a dicho logro, se debe atravesar por un proceso de internalización de conocimientos de mayor complejidad que los adquiridos previamente, adaptarse a nuevas lógicas y a una nueva relación con el conocimiento. Por ello, el rol del tutor es fundamental para acompañar y sostener los recorridos iniciales de estos jóvenes que transitan una nueva experiencia educativa. “La función de tutoría se fundamenta en la importancia del conocimiento de cada grupo si se desea tener una educación más adaptadas a las necesidades y dificultades de los alumnos. Además, se propone el mejoramiento de las condiciones de aprendizaje, lo cual implica orientar a los alumnos en lo concerniente a problemas de estudio o conductas personales o relacionales” (Dari, 2004). La constitución del rol de estudiante, que implica un tipo particular de aprendizaje, configura un proceso de construcción de significados que condiciona las percepciones de los alumnos sobre la institución y su participación efectiva en los eventos del aula” (Ruis Danegger, 2000).
Es en este sentido que, la Universidad Nacional del Litoral viene pensando y repensando políticas de permanencia. Una de ellas es el Programa de Becas de Tutoría para el Apoyo al Ingreso y Permanencia de Estudiantes, que hace 15 años se encuentra en vigencia y cuyos objetivos actuales son: Acompañar institucionalmente a los ingresantes y estudiantes en el ciclo inicial de sus carreras con el fin de facilitar su incorporación al ámbito académico, vida universitaria y desempeño en las asignaturas específicas a través de diferentes propuestas de actividades y espacios de consulta; identificar las principales problemáticas asociadas al desarrollo y comprensión de las propuestas académicas de las asignaturas de primer año, actuando como nexo entre los ingresantes y equipos de cátedra; propiciar, en los ingresantes, el establecimiento de lazos con la institución universitaria y, detectar las principales causas de abandono.
Por medio de los espacios tutoriales se deben abordar las distintas problemáticas surgidas como también promover el desarrollo de competencias que mejoren el desenvolvimiento en el aula. Las diferentes estrategias de estudio, los modos de organizar sus tiempos, entre otro; es un proceso que lleva su tiempo, paciencia y esfuerzo, en tal sentido recuperamos a Manuale (2000) quien sostiene: “El objetivo del uso de estrategias y su enseñanza explícita es lograr aprendices autónomos, capaces de enfrentarse de manera inteligente a textos de diferente índole, ser capaz de interrogarse acerca de su propia comprensión, entablar relaciones entre lo que se sólo como un aporte se lee y su estructura cognitiva y experiencias personales, cuestionar el propio conocimiento y modificarlo, establecer generalizaciones que permitan transferir lo aprendido a contextos diferentes”.
Dentro del programa los becarios inician sus actividades en el Programa de Ingreso de la UNL con el objetivo de acompañar a los ingresantes durante el desarrollo de los cursos de articulación disciplinar. Actualmente la universidad cuenta con 9 disciplinas en el ingreso: Matemática, Química, Biología, Ciencias Sociales, Pensar la Ocupación Humana, Cuestiones sobre el Lenguaje, Iniciación a los Estudios Filosóficos, Música y Lectura y Escritura de Textos Académicos. Una vez finalizado este período los becarios desarrollan sus actividades en asignaturas del ciclo inicial (elegidos por ellos) durante los dos cuatrimestres del año académico. Los becarios de tutoría diseñan y orientan sus actividades conjuntamente con un director y con el aval del mismo presentan un plan de trabajo al inicio de la beca. Luego, a mitad de año y al finalizar presentan un informe parcial y final respectivamente, en el cual vuelcan los resultados de su experiencia y dan cuenta del grado de cumplimiento del plan de trabajo, los cambios y dificultades presentadas en su implementación. En los últimos años los becarios han participado en diversas actividades de articulación con escuelas secundarias organizadas por la Universidad, en la cuales se trabaja en la orientación educativa de los posibles aspirantes a las instituciones de educación superior.
Como todos los Programas que llevan algún tiempo importante de implementación se ha venido sometiendo a una permanente a revisión con el objetivo de reconfigurar el rol que tienen los estudiantes avanzados. Es por esto que creemos necesario indagar con mayor detenimiento las problemáticas que se intentan abordar y dar respuesta a través de las tutorías, en pos de revisar el programa para su resignificación en nuevos contextos y en sintonía con las diferentes políticas de contención y permanencia que llevan adelante las diferentes unidades académicas. Para ello, es necesario fortalecer los vínculos entre quienes asumen el desafío de formar parte de este programa: estudiantes, docentes, y las áreas de gestión de las diferentes facultades involucradas en esta temática, habilitar espacios de intercambio que nos permitan trabajar en forma conjunta y colaborativa en problemas comunes sin perder de vista los específicos y propios de cada carrera.
Palabras claves: Permanencia, Ingreso, Tutores Pares, Rol.
